top of page
  • Foto del escritorDavid Torregrosa

BOLA EXTRA: NSR Mosler “Vaca Lechera”. el día que AlbaRacing no se comió uno, sino dos mojones.

Quisiera yo hacer un aporte al tema semanal. En realidad debería estar ultimando un pequeño gran proyecto que, dicho sea de paso, debí haber terminado en Enero. Pero mis musas de la inspiración no están por la labor de ayudarme y ahí lo tengo, con la parte más importante realizada y a falta de rematar, pero sin esa energía vital que me impulse a darle el espaldarazo definitivo para presentarlo en público.


Con lo que si me encuentro a gusto es escribiendo pildoritas* por aquí. (*N.d.l.r. Empezó como píldora y se ha convertido en un tocho) Me resulta terapéutico, no sé si tanto al lector, a quien primero le cuento mi vida, a modo de sufrido peaje a pagar a cambio de luego contarle mi vida también, solo que de slot, que es lo que de verdad le interesa.


Al menos en mi caso, la cuestión no es encontrar un coche, si no "EL” coche. Pintados en dos o más colores, tal como proponen nuestros sesudos y altruistas moderadores para este septenario, hay a patadas y cualquier escusa sería buena para presentar cualquier slot. Un monocromo, sencillamente adornado con unos buenos dorsales en otra tonalidad, ya valdrían para justificar la ponencia. Pero una policromía con las tonalidades bien diferenciadas, definidas, es un grado más complicado. Volviendo a la disyuntiva, podría colocar por aquí, a saber, cualquier coche de mi escudería, siempre pintados con la ya clásica paleta AlbaRacing en secuencia amarillo blanco rojo tan reconocible. Sin embargo, aunque sería una oportunidad estupenda con la escudarme para postear estas y otras maravillas que me muero por presentar y redescubrir por aquí, su idiosincrasia propia piden esperar a una mejor escusa con la que mostrarlas, a una temática idónea que se ajuste perfectamente a su motivo de ser.


De todos, toditos, todos de los míos, lo he tenido claro. Y eso que lo tenía olvidado en mi archivo fotográfico (tengo mi garaje tristemente lejos y lo único que me queda es la carpeta de mi PC) Si de colores diferentes se trata, desde luego no hay nada mas contrapuesto que el blanco y el negro. Y debe ser que en su momento así lo pensé y que, por eso, he tenido una conexión tan reveladora con el pasado, mientras elucubraba con qué aparato podía presentarme hoy para escaquearme de mí mismo y ese proyecto pendiente de acabar.



De este coche algo recuerdo. Quizás Igor Baldres San Pedro o Fernando López de Gea, que en aquella época corríamos juntos, puedan arrojar luz al asunto. Pero me suena que, una vez elevada a público y expuesta la ida de pelota, se convirtió en un “sujétame el cubata” estándar. Lleva kit de luces y lo terminé en Noviembre de 2010, por lo que tiene todas las papeletas de que lo usáramos en las míticas 12 horas Murcislot Slot Club de aquel año. Pero cómo sucedió el desarrollo de la carrera, es una terrible laguna que ahora mismo no consigo desbloquear…


2º parte (Post Edition)


¿O si? La llamada a mis buenos colegones ha surtido efecto, siendo el ilustrísimo Igor Baldres San Pedro quien ha clarificado el asunto y el descuadre en cuanto a fechas que en mi mente tenía y, por el cual, parecía que no recordaba nada.


Insisto en que “parecía” pues, el recuerdo de las 12 horas de Murcia lo tenía grabado con fecha un año posterior, sin embargo he visto que era acertada, de 2010 y aquello encaja perfectamente

con lo que tenía en mi desordenada cabeza.


Y como todo encaja igual que un guante de látex en la mano del doctor que te va a comprobar la próstata, allá que voy a completar el post incompleto continuando con lo que debería haber sido el título de este:


BOLA EXTRA. NSR Mosler MT900 “Vaca Lechera”: el día que AlbaRacing no se comió uno, sino dos mojones.


Repito por tercera vez que estamos en el año 2010 en alusión a mí mismo, a ver si escribiéndolo varias veces no se me olvida. Pero pongámonos en situación.


Por un lado, en AlbaRacing estamos muy arriba y, en verdad, no era para menos. Por aquel entonces el tio Josep Aloy Carbo nos esponsorizaba, algunos pilotos nos hicimos el Europeo de Slot.it e, incluso, ganamos en Reus la primera carrera de, nada mas y nada menos, el RESISCAT. No está nada mal para un equipo con sede en Albacete.


Por el otro, se acercaba la XIIX edición de la mitiquísima carrera murciana que se celebra en Diciembre y que es una mezcla entre el fin de fiesta, cierre del año y “el que cuela, gana”.



Así que estaba completamente claro: había que sembrar el caos y la destrucción masiva a nuestro paso. Y ¿Qué es mejor que ir a por una carrera? Pues, hacer doblete. Con este objetivo nos juntamos un elenco tocho y muy jodido de superar, compuesto por @Maxi Ruiz, Iniesta, Andrés Solichero Albaladejo, Igor Baldres San Pedro, Fernando López de Gea, Tito y el que escribe estas líneas. Poco menos que el más manco de nosotros te pita una vuelta rápida o te hace un récord de vueltas. Lo miro con retrospectiva y vaya equipazo que nos juntamos.



Nos dividimos en dos partes, una sería Aloy Conducción y, la otra, Aloy Temeraria. La parte de Aloy está clara, sin embargo la otra tiene su explicación, y es que cuando hemos juntado varias escuderías (en este caso de Cartagena, Elche y Albacete) acordamos renombrarnos como Conducción Temeraria, en lo que es una buena declaración de intenciones.


Con este plantel llega el día de la carrera y allí que nos plantamos con un despliegue de medios igual de grandes que nuestras pretensiones. Acaparadas dos mesas de boxes dónde aparcamos tres maletas de herramientas, dos cajas porta-coches, nevera y hasta un PC portátil, que no usamos para nada pero que quedaba de lo mas molón.


Para echar mas leña al fuego, nos presentamos con sendos chasis “Superlleggera EVO II” que construí y junto a Fernando López de Gea desarrollamos y pusimos a punto para la ocasión. (El post, pinchando en el siguiente enlace: https://albaracing.wixsite.com/.../trucos-y-trampas...) Junto a estos chasis probamos varias carrocerías de NSR Mosler MT900 con diferentes posiciones para el kit de luces, fruto de lo cual esta co-protagonista fue descartada en pos de las finalistas, una amarillo flúor que se veía indiscutiblemente bien y, otra, naranja y con el chip de luces en una radical posición debajo del eje trasero.


¿Algo podía salir mal? Claro que . Aunque los teníamos en cuenta, porque eran el equipo a batir, teníamos en frente al equipo Pepino Murcislot. No hay que ser muy avispado para adivinar, por el nombre, que son el equipo local, que se conocen la pista igual de bien que el pasillo de su casa y, aunque esto ya es cosecha propia, creo que se veían como David ante Goliat.


Prueba de ello es el primer aviso que dieron al firmar la Pole Position. Nosotros, detrás, en segunda y cuarta plaza. Con la carrera lanzada quedaba claro que el tema iba a estar entre nosotros tres y, desde el principio, aquello se planteó por parte de todos como una carrera al sprint. El primer tercio de carrera resultó una lucha infernal a tres bandas, muy pero que muy intensa, aunque un par de breves paradas en boxes ponía al rebufo a uno de nuestros equipos.


Antes del segundo tercio, que sería nocturno y con las luces de los coches funcionando, llegó el drama. El otro equipo, Aloy Temeraria, funde el kit de luces, precisamente por hacer contacto con el eje trasero. La parada para sustituirlo supone una sangría de vueltas insalvable, por lo que ahora la lucha es entre dos.


En la etapa nocturna Aloy Conducción son los mas rápidos, con lo que no solo consiguen reponerse de las primeras paradas en boxes, si no afrontar el último tercio de carrera líderes, aunque con Pepino Murcislot echándoles el aliento en la nuca a sólo 3 vueltas de distancia.


Si, hasta ahora, el ritmo de pilotaje era de carrera al sprint, estas últimas tres horas serían demenciales. Los de Pepino, haciendo relevos como si Lucifer fuera detrás de ellos a finiquitar cuentas, consiguen adelantar a los que quedan vivos de Aloy, que les falta gatillo para apretar a fondo.


A todo esto, mientras, los que estábamos hundidos del otro equipo de Aloy, aparecemos marcando la vuelta rápida de carrera y destrozando el cronómetro a más de medio segundo del siguiente mejor registro… una locura.


El tiempo se va terminando y el saldo de cuatro vueltas del equipo local rápidamente se ve mermado por los chicos de Aloy, que aprovechan mejores pistas para comerse como una lima la diferencia de vueltas. Yendo como balas hasta el mismísimo final, bajo la bajada de la bandera a cuadros pasa en primero lugar Pepino Murcislot y sólo dos vueltas por detrás (menos de 30 segundos) Aloy Conducción.



Merecidísima victoria para un equipo que, creo no me equivoco, no cometieron errores.


En cuanto a nosotros, perdimos teniendo los coches más rápidos, igual que Toyota en Le Mans cuando no corre a solas. Nos faltó tener ese puntito de fiabilidad, imprescindible cuando las carreras se juegan a los puntos.

Quizás, seguramente, sea exagerado decir que nos comimos un torrao con la segunda plaza y la VR pero ¿qué es la vida sin drama?

En cualquier caso, para los afortunados que pudimos disfrutarla, aquella fue una edición muy gloriosa para la carrera mítica entre las míticas.

0 comentarios
bottom of page